Un taxi viene a buscarnos a la recepción y nos lleva a la parada de autobuses, allí cogemos la furgoneta de vuelta a Bangkok, tenemos el vuelo a Chiang Mai por la tarde.
Tenemos tiempo más que de sobras así que llegamos al aeropuerto y comemos tranquilamente, al facturar el equipaje nos dicen que nuestro vuelo lo han atrasado pero que podemos esperar en el Lounge de Bangkok Aiways donde comida, bebida, café, wifi y unas butacas muy cómodas, así que pasamos un par de horas la mar de entretenidos.
Subimos al avión y en hora y media ya estamos aterrizando en Chiang Mai, a anochecido y no podemos ver el paisaje, salimos del aeropuerto y pedimos un taxi con Grab, en breve llegamos a nuestro hotel en Chian Mai Villa Sanpakoi, el sitio promete, todo impecable, el personal muy amable, una piscina impresionante.
Estamos muy cansados, nos acomodamos y nos vamos a dormir, mañana queremos aprovechar para ver Chiang Mai y darnos un baño en esa piscina que tiene muy buena pinta.
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